El pasado viernes 25 de Noviembre, como teníamos comunicado, una
representación de varios jóvenes de –elmunicipiotoledo- se desplazo a Madrid
para acudir a la concentración próvida, convocada por Jóvenes por un causa, para
reivindicar el derecho a la vida de todo ser humano sin excepción y denunciar
la
criminal labor que realiza la clínica abortista Dator en la ciudad de
Madrid.
Al llegar la representación de
–elmunicipiotoledo- a la misma puerta de la clínica abortista nos encontramos
con que solo hay un único joven, solo en la puerta, luchando por el derecho a la
vida, realizando rescates de vidas humanas para que las mujeres no aborten. Tras
las presentaciones, nos comenta emocionado que ya ha salvado cuatro vidas
humanas de las garras del aborto.
Alrededor de las 8 de la tarde y
ya pensando que la concentración seria un auténtico fracaso, ya que solo estaban
en la puerta de la clínica abortista media docena de personas, escuchamos en las
calles paralelas fuertes voces, que como del amanecer se tratara, son voces que
gritan por la vida, voces sinceras clamando por el derecho a la vida y en
memoria de todos los niños no nacidos. Tras girar la esquina vemos como se
acercan un grupo numeroso de unos 150 jóvenes por una causa; esta vez por la
causa de la vida, con el único arma de sus voces, su sentimiento, su espíritu y
su valentía, acompañados de sus pancartas y sus banderas por el derecho a
vivir.
Como suele ser habitual al inicio de este tipo de concentraciones,
los miembros del cuerpo de policía nacional nos piden que nos alejemos unos
metros de la puerta de la clínica abortista. Con esta orden
sólo consiguieron que nuestras voces, las voces de los jóvenes por una causa,
las voces de los jóvenes por la vida, en repulsa de los asesinatos que se realizan en las clínicas abortistas,
fueran más fuertes y enérgicas, llegando directamente al
cielo.
Tras escuchar todas las intervenciones y los
discursos de los jóvenes por una causa y después de estar frente a la clínica
abortista Dator mas de una hora y media, la representación de
–elmunicipiotoledo- consideramos que los responsables de tan deplorable clínica
abortista se habían dado por aludidos y por enterados con nuestras
reivindicaciones y decidimos dar por finalizada nuestra presencia en la
zona.
-elmunicipiotoledo- seguirá denunciando y
reivindicando, dentro de nuestras posibilidades, el derecho a la vida de los no
nacidos y la completa derogación de la genocida legislación abortista que existe
en España. La victoria electoral del Partido Popular no significa que la
situación vaya a cambiar y continuaremos llevando nuestras reivindicaciones a la
calle, sea quien sea el gobernante de
turno.
¡Ni aborto del PSOE, ni aborto del
PP!
¡SÍ A LA VIDA!
Discurso de un miembro de Jóvenes por una
causa:
Aquí estamos de
nuevo cinco días después de las elecciones generales. Algunos además venimos del
congreso de Juventud con Valores en el que los testimonios que hemos oído nos
han revitalizado. No sé vosotros, pero yo salgo más convencido que nunca de que
vale la pena luchar por la vida, luchar por los valores en los que creemos. Pero
ha cambiado la situación, la lucha por la vida no será la misma que estos
últimos siete años. No sé si alguno de vosotros habéis empezado a luchar por la
vida a los doce años, pero yo no conozco otra situación y creo es de rigor hacer
una breve pausa para ver dónde estamos antes de decidir hacia donde
dirigirnos.
Se ha echado a
los canallas responsables de la mayor expansión del genocidio del aborto en los
últimos años. Si si, aplaudid, que es de celebrarse. Nos alegramos todos.
Algunos también se alegran por el partido que ha entrado como alternativa. Yo
también me uno a esa alegría, pero con reservas.
Hay una nueva
mayoría parlamentaria. 187 escaños que no solo son suficientes para derogar la
actual ley del aborto y aprobar medidas de protección al embarazo, a la
maternidad y a la familia. Son 187 escaños que serían suficientes si hubiera
voluntad política y valentía en la defensa de los valores para abolir de forma
total el aborto en España. Pero la situación no es tan idílica.
El Partido
Popular ha tenido ya ocasión de mostrar una defensa valiente de la vida con su
mayoría absoluta en la segunda legislatura de Aznar, y no fue así. Así es, el
mismo que se presenta ahora a las manifestaciones multitudinarias por la vida no
sólo no cambió la ley, sino que permitió que el aborto siguiera creciendo de
forma alarmante al no hacer frente al fraude de ley que suponía el supuesto
coladero del peligro físico o psíquico de la madre.
Quizá alguno
piense que la situación ahora es otra, que ahora si que tienen un compromiso con
la vida que antes no estaba tan claro. De nuevo hago de aguafiestas y manifiesto
mis reservas. En el PP han hablado de dos posibilidades. La primera, de volver a
la ley anterior (aquella de los más de 100.000 niños muertos al año, niños igual
de muertos gobierne quien gobierne). La segunda de mantener la ley actual que
consagra el asesinato de los no nacidos como un derecho, retocándola para que
las menores necesiten el consentimiento paterno. Esto es lo que nos ofrecen, y
hemos de decirles bien alto y bien claro: ¡Eso no nos basta!
Nos toca luchar
ahora más que nunca, porque no sólo tendremos que luchar contra la cobardía de
un nuevo gobierno que deja la batalla de las ideas a la izquierda radical por
miedo a la polémica, sino que tendremos que hacer frente precisamente a esa
izquierda que empieza a recordar que la calle existe.
Se echará a la
calle un PSOE que busca recuperar el apoyo y la relevancia social que ha
perdido. Se echará a la calle una Izquierda Unida que se envalentona con sus
once diputados. Se echará a la calle esa izquierda marginal y antisistema que al
grito del “no nos representan” se erige en representante de todos nosotros. Se
echarán a la calle con el respaldo del dinero ensangrentado del negocio
multimillonario del aborto, que también engrasaran los pasillos del poder.
Os dije que
sentía una alegría con reservas, pero aún así sigue siendo una alegría
desbordante. Si las dificultades que se nos presentan son grandes, si la
respuesta es virulenta, es porque las posibilidades de victoria son también
grandes. Ladran, Sancho, luego cabalgamos.
Luchamos contra
la tibieza y la cobardía, si, pero es mejor luchar porque se mueva alguien a
quien hay que convencer que haga el bien, que luchar por detener a quien quiere
hacer activamente el mal. Podemos hacer del voto y la conciencia provida algo
imprescindible para el PP y así obligarles a mover ficha.
Es cierto que
empiezan a despertar los elementos proabortistas, pero a nosotros nos pillan de
pie. Ellos saldrán, pero nosotros ya estamos aquí. Estamos aquí porque sabemos
que la vida humana vale la pena, porque nos negamos a ser recordados como
quienes permitieron complacientes el mayor genocidio de la historia del
Hombre.
Nosotros no
tenemos el apoyo institucional que tendrán nuestros adversarios, ni tampoco
tenemos los millones del negocio lucrativo de la muerte a nuestras espaldas.
Tenemos algo mucho más importante, algo con lo que ellos nunca podrán contar:
¡Tenemos la razón! Nuestros esfuerzos, nuestro movimiento, está respaldado por
la Justicia y la Verdad, y más tarde o más temprano, la Verdad siempre acaba
venciendo.
Repito que
nosotros ya estamos despiertos y que no pararemos hasta conseguir el fin del
aborto. Pero digo precisamente eso, no es una figura retórica por la cual quiero
decir que trabajaremos para hacer posible que algún día se le ponga fin:
Convenceos: Somos la primera generación que tiene la posibilidad, la capacidad y
el arrojo necesario para hacer llegar el fin del aborto ¡En nuestros días!
Al final va a
ser cierto aquello que tanto oímos en la campaña electoral. Si que había que
sumarse a un cambio. Pero ese cambio no llegó en las urnas el 20 de Noviembre,
ni tampoco llegará cuando entre el nuevo gobierno. Ese cambio está aquí,
presente en más de 150 jóvenes que están dispuestos a dar la lucha por la vida,
a dar el callo por sus valores, por cambiar su entorno, por cambiar España y por
eso lograrán cambiar el mundo.
Así que, si
nosotros somos esa generación que pondrá fin al aborto, entonces vamos a
ponernos manos a la obra gritando todos juntos ¡VIVA LA
VIDA!
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