Traslado de la Corona al Valle.

FE-LA FALANGE/ Corrían los primeros minutos del día 20 de Noviembre, cuando se iniciaba el acto más emotivo, sentimental y que nos llega de orgullo a los falangistas, el Traslado de la Corona hasta el Valle de los Caídos.

La noche se presentaba desapacible y pasada por agua como luego pudimos comprobar y tras la bendición de la corona y pedir permiso el Jefe Territorial de Madrid, camarada Miguel Valenciano al Jefe Nacional, la comitiva se puso en marcha camino de la carretera de La Coruña.

A la cabeza, el camarada Manuel Andrino y nuestro Secretario General, camarada José Sancho, y a su lado, como hicieron durante toda la noche, los camaradas Nacho Batres, Segundo, Oscar Sánchez "Rayito" y Willian.

En el Puente de los Franceses la primera parada para ponernos los chalecos reflectantes y colocar los coches con los rotativos luminosos, justo donde nos "cogían" los miembros de la G. Civil para que no pudieran justificar la rabia y el ardor de estómago que les había producido el que ganáramos el juicio y nuestro derecho a hacer la Marcha.

Los relevos se sucedían al mando de su jefe correspondiente y de destacar era la participación de nuestros camaradas de las Jefaturas de Toledo al mando su Jefe Provincial, camarada Florentino, de Brunete, de Pozuelo, de Barcelona, con Luis Alonso a la cabeza, de Cuenca, con David Fernández, etc. etc. así como camaradas del Frente de la Juventud como Mª Cruz o Abelardo Pons.

Según nos distanciábamos de Madrid la lluvia arreciaba y la Marcha se hacía más dura y desagradable.

Aún así, los participantes en los Relevos, unos portando las andas, otros las linternas y otros acompañando y escoltando a los anteriores, cumplían su servicio sin un solo lamento y aguantando estoicamente las inclemencias del tiempo y los kilómetros cuesta arriba.

Dos autocares y varios coches iban de relevo en relevo apoyando a la comitiva y dando seguridad a la misma, viendo el ridiculo dispositivo que el, en otros tiempos, benemérito instituto, daba a la Marcha de los Falangistas. Mejor sería que ni hubieran aparecido para el papelón que llevan haciendo ya durante demasiados años.

Eran las 6:40 horas aproximadamente, cuando el Jefe Nacional ordenó Alto al relevo correspondiente, puesto que a esa hora, hace 75 años, un pelotón, eso si, democrático, formado por socialistas, comunistas y anarquistas, fusiló a JOSÉ ANTONIO PRIMO DE RIVERA en el patio de la cárcel de Alicante.

Tras decir unas breves pero intensas y emotivas palabras sobre nuestro Fundador, continuamos nuestro peregrinar hasta la puerta del Valle de los Caídos, adonde llegamos, marcando el paso y en perfecta formación y donde nos esperaban nuestros camaradas que aplaudieron a la llegada de la Corona.

Antes de entonar el Cara al Sol y mandar romper filas, el camarada Manuel Andrino, tomó el megáfono y dijo estar orgulloso de haber compartido esa noche de fatigas y cansancio con los allí presentes, y que, aunque solo fuéramos un puñado de españoles de bien, los dispuestos al sacrificio, siempre estaríamos dispuestos al mismo y al reconocimiento a los que murieron por una España mejor y que ninguna Ley de Memoria Histórica ni la amenaza de las fuerzas policiales allí presentes, nos iban a impedir el seguir haciéndolo año tras año.

El Presidente de la Hermandad de la Vieja Guardia, camarada Carlos Batres, acompañado de Carlos Rodriguez, Jefe Nacional del Sindicato Falangista, T.N.S. depositaron la corona transportada durante toda la noche, en la puerta de acceso a la Basílica del Valle de los Caídos, puesto que los falangistas no estamos dispuestos a acceder al recinto sagrado a escondidas y avergonzados de nuestras banderas y nuestras camisas azules. Allá ellos quienes se rebajen a dicha actitud.

Por último, nuestro desprecio y asco para aquellos que tras la negación de los Tribunal el año pasado para realizar la misma Marcha de la Corona, abonaron la teoría de la "conspiración" y la connivencia con los supuestos "poderes ocultos del Estado" y sus alcantarillas.

Una vez más hemos peleado y nos hemos dejado hasta el último aliento en una pelea tan desigual y solo el coraje y la determinación de unos pocos han conseguido esta victoria, pírrica, pero victoria.

ARRIBA ESPAÑA